Muerte de los URLŸs

Cuando hace dos años atrás, la web seguía creciendo a un ritmo exponencial, la tasa de muerte de los sitios era del 44% anual, lo que suponía que si los links de referencia no se actualizaban anualmente, casi la mitad serían inaccesibles solo un año mas tarde de cuando la referencia original se habia puesto en la red. Y a medida que nos alejábamos en el tiempo las posibilidades de hacer un click y obtener el resultado esperado descenderían exponencialmente.

Podemos imaginar como estas malas noticias están perturbando el funcionamiento actual de la red, cuando en el interin se cayeron miles de sitios y muchas referencias a experiencias valiosas y a información mas que interesante en la red está desapareciendo a pasos agigantados.

Es cierto que algunas iniciativas como el Archivo Internet tratan de paliar esta infausta situación. No lo es menos que un medio tan fluido tiene ventajas maravillosas como es la publixacion instantánea y al mismo tiempo desventaja formidables como su efimeralizacion.

En muchos sentidos esto de los links rotos no es tan grave. Porque si ciertos negocios ya no existen ¿que importa que los links que llevaban a ellos no respondan? En todo caso sirven para constatar, cual partida de defunción, su inexistencia. Pero las cosas se complican cuando los links a empresas, a productos, a servicios o simplemente a información en sitios comerciales -y de otras denominaicones- son las terminales nerviosas de cursos, conferencias, bibliografías, directorios, catálogos, etc. que de pronto ven devaluados su valor porque aquello a lo que apuntan ya no existe mas.
Esto es particularmente así en el caso de los cursos. ¿Cuantos de los links que están incluidos en los cursos dirigidos a grandes empresas, realizados por las de e-learning, han dejado de funcionar, porque esos sitios web o no han sido actualizados, o ya no existen mas, y qué metodología podríamos utilizar para chequearlos en forma sistemática y automática y reemplazarlos (menudo problema) del mismo modo?

Sea como sea la constatación es harto desagradable. Los links rotos obstaculizan el aprendizaje en la Web. Se trata de un grave problema que podría incidir negativamente tanto en los cursos de formación online como en los tradicionales. Por eso es realmente molesto dar con un link roto mientras uno navega por la Red.

Que esto no era una mera fantasía de auditoras muy laxas de las tasas de vidas de los links, lo demuestra el trabajo al que se abocaron John Markwell y David Brooks dos investigadores de la Universidad de Nebraska, sede Lincoln, quienes comenzaron a hacer un seguimiento de ese fenómeno después de comprobar que cuando desarrollaban cursos de educación a distancia, los links desaparecían antes de haber terminado siquiera de diseñar los cursos.
Este estudio, denominado «Broken links: The ephemeral nature of educational WWW hyperlinks» (Links rotos: lo efímero de los hipervínculos www educativos) será publicado en el Journal of Science Education and Technologyen el mes de junio. Aunque ya podemos encontrar un anticipo de los resultados en el link citado mas arriba, si es que no desaparecio desde cuando lo consultamos hace uns minutos atras.

Markwell y David Brooks, un profesor de química, colaboraron en el desarrollo de tres cursos de posgrado en bioquímica para docentes de nivel secundario. Los alumnos pueden tomar el curso en cualquier momento, según les resulte más cómodo.

Lo novedoso del experimento de estos dos docentes es que cada mes, dedican unas cuatro horas a verificar que los 515
hipervínculos citados todavía estén en condiciones, para asegurarse así de que los alumnos van a contar con material de referencia actualizado.
Los resultados de John Markwell y David Brooks en «Broken Links: Just How Rapidly Do Science Education Hyperlinks Go Extinct?» dejarían esa alta cifra exclusivamente para las punto.com, y bajarían el promedio a 18% y a una tasa de mortalidad del 50% cada 55 meses ver )
Al cabo de 20 meses, el 18,8 por ciento del total de los hipervínculos había desaparecido. Más del 11 por ciento eran links puntoorg, el 18,4 por ciento eran páginas puntoedu y el 42,5 por ciento eran direcciones puntocom.

Y los links que desaparecen no son cualesquiera sino recursos didácticos de primer orden como información proveniente E de la Clínica Mayo, de una enciclopedia de biología vegetal, links puntocom que enlazan con sitios que tratan sobre el uso de esteroides, y enlaces con cursos que incluyen importantes tesis de cotirado, informó Markwell.

Frente a la constatacion los investigadores han hecho varias propuestas entre las que es cuentan generar un repositorio global de recursos cuidados por instituciones científicas, inventar un software capaz de verificar el estado de los hipervínculos para los miembros del cuerpo académico, y alertarlos a través del email en caso de que se produzca un cambio en las URLs o en los contenidos.

Ese tipo de software ha ayudado a la e-global library, la biblioteca online para los estudiantes de la Jones International University, a mantener actualizadas sus referencias de recursos de Internet. . Porque en un experimento único la e-global library verifica cada uno de los links cada 24 horas para cerciorarse de que cada uno de los enlaces que constan en su base de datos todavía funcionen.

Por lo general, este escaneo detecta 30 enlaces inválidos por día. Alrededor de la mitad de ellos estaban invalidados porque el servidor estaba fuera de servicio, en cinco casos la página ya no se encontraba alojada en ese servidor, y los otros 10 habían desaparecido.

Otros investigadores como los directivos del Professional and Distance Education (Formación Profesional y a Distancia) del Rensselaer Polytechnic Institute (Instituto Politécnico Rensselaer) se toman todas estas cosas en solfa y no se hacen el mas mínimo problema.

Saben que el medio es sumamente volátil, que los alumnos de alto nivel de formación o profesional saben que un % importante de links desaparecen permanentemente, y que este es el precio que hay que pagar por movernos en un medio que funciona en tiempo real.

Sea como fuere es interesante contar con una medida tan fina de links rotos, constarar que los links académicos tienen mucha mas duración que los comerciales, y que seria posible imaginar nuevos protocolos y procedimientos para combinar lo mejor de los dos mundos, la estabilidad del papel con la actualización permanente de la pantalla. Enhorabuena.