Saltar al contenido

Infonomia.com por dentro

cornella.gif Efectivamente Infonomia -como nos paso a casi todos en el resto del mundo, se achicó. De la veintena original que eran apenas quedan hoy 10. De la empresa inicial ahora tenemos esas dos 0 y 1 -que se dedica a la consultoria estratégica- y Zero Factory de la cual depende Infonomia.com que esta en plena efervescencia. El motor de ambas razones sociales es un señor bajito, hiperactivo mentalmente, de modalos calmos y tranquilos llamado obviamente Alfons Cornella, que una vez que entra en confianza, y mas alla de las prevenciones, resulta ser una persona calida y estimulante con la cual uno se pasaria horas charlando, tomando vino – o cañas, aunque el discretamente toma agua sin gas- y comiendo quesos y tapas.


Hace años que insisto en que los libros (al igual que cualquier otro producto cultural) deben venir con las fotos de sus factotums. Y que estas no deben ser cualesquiera, sino las mas recientes posibles. No tanto por envanecimiento o por pretensión, sino porque de nada nos sirve imaginarnos a quien escribió o hizo algo -en el caso de que este vivo- si viene acompañado de una imagen tomada en el colegio secundario -por mas Dorian Greys que algunos se (nos) crean(mos). En el caso de los autores muertos, habría que ver cual es la mas representativa – tratar de que no nos pase lo que enla pelciula española Los Muertos.

Pero el tema de las fotos es menor respecto de algo mas de fondo. La pretensión (o necesidad) apunta a que lo escrito o producido sea reubicado en el contexto de quien lo hizo o fabrico. No se trata meramente de resubjetivizar el producto (camino inverso al de su reificacion como busca el capitalismo) sino mas bien de reinscribir a los objetos materiales en las cadenas de contextos -algo que le preocupa mucho actualmente a José Manuel Perez Tornero director de la Maestria de Educacion y Comunicacion– que los hacen posibles.

Claro se puede dar un paso mas -hábil y magistralmente bien sucedido por Jean Marie Schaeffer en ¿Porque la ficción? (Lengua de Trapo, Toledo, 2002), pero sobre eso volveremos pronto- y tratar de desarmar los productos a partir de las condiciones de su construcción, aunque en esa dirección vamos hoy.

Dejémonos de poner obstáculos y vayamos al meollo de la cosa. Desde donde estoy alojado en el corazón del barrio gótico a donde el personaje de hoy descansa sus reales hay apenas 2 estaciones de Metro. Cuando uno se baja en la Ciudadela o Villa Olímpica se encuentra con una versión mucho mas despojada y fría aun (muchisimo mas grande) de lo que queda hoy de Puerto Madero.

Después hay que empezar a caminar en dirección contraria al Zoo. Muchas cuadras, unas 10. Rara vez nos topamos con un negocio en el camino, y al final de la Avenida Icaria, entramos en zona de destrucción industrial. Al fondo hay apenas fabricas y oficinas, casi como en los bordes de Barracas donde la municipalidad porteña instalo su Centro de Diseño,

Y en el numero 207 (aquí cada cuadra gasta apenas una decena de números) esta oculta como pueden estarlo los cuarteles generales de algun em,prendimiento invisible, Infonomia versión 2002 (en algunas paginas del sitio aun no cambiaron la vieja dirección de Tirant lo Blanc, tan poco hace que se mudaron).

El edificio fue hasta hace poco un gigantesco almacén y solo se puede accederlo haciéndonos cargos de nuestra calidad de animales indiciarios. Mirando el buzón, trepando por una escalera o animandose a subir por el ascensor industrial. Cuando finalmente llegamos, un puñado de sobrevivientes de la Infonomia original, agrupados en dos empresas iguales y distintas -como son 0 y 1 y Zero Factory– asoman al fondo, en un inmenso loft.

Porque efectivamente Infonomia -como nos paso a casi todos en el resto del mundo, se achicó. De la veintena original que eran apenas quedan hoy 10. De la empresa inicial ahora tenemos esas dos 0 y 1 -que se dedica a la consultoria estratégica- y Zero Factory de la cual depende Infonomia.com que esta en plena efervescencia. El motor de ambas razones sociales es un señor bajito, hiperactivo mentalmente, de modalos calmos y tranquilos llamado obviamente Alfons Cornella, que una vez que entra en confianza, y mas alla de las prevenciones, resulta ser una persona calida y estimulante con la cual uno se pasaria horas charlando, tomando vino – o cañas, aunque el discretamente toma agua sin gas- y comiendo quesos y tapas.

Empece a leer los Extra-Nets en algún momento del año 96/97. Cuando Luis Éngel Fernández Hermana, CEO de Enredando me invito a la reunión presencial de los Periodistas Digitales en Mayo de 98, supe que Alfons estaría en un panel y le mande un mail que el respondio cortantemente. Finalmente aunque me lo cruce en el Politécnico de Catalunya no hable con el, y recién lo visite formalmente a fines de 1999, en una charla breve y sin mayores consecuencias.

Lo volví a ver en el 2000 y en el 2001 y en ambas oportunidades ya cruzamos mas de una palabra y empezamos a entrever intereses comunes. Por suerte a fines -cuando consegui su recientemente publciado libro hoy en su segunda edicion- el 2001 Alfons acepto presentar mi libro La Generación Nasdaq en el coqueto Colegio de Marketing en la Vía de las cortes catalanas, tratandolo con cariño como si fuera mi persona.

Infonomia made in 2002

Mientras tanto Extra-Net -despues de 600 brillantes ediciones convertidas en un CD conmemorativo- mutó en Ke! (Knowledge Energy; ya hay cerca de 50 numeros pub licados), y del modelo de acceso totalmente gratuito pasamos a l s suscripciones (Infonomia ya tiene mas de 1.000 lo que le genera ingresos anuales en este rubro por U$ 50.000), y de la evangelización genérica pasamos a los Talleres presenciales (Actualmente los mas tomados son el Portal del Empleado y se anuncia para los próximos días uno sobre Visualizacion de la Informacion asi como otro sobre E-learning).

Tambien tenemos una revista en papel y en PDF que ya va por su sexta edición (Se trata de Papeles de Infonomia. Para entender la empresa en red. Selección mensual de las mejores ideas publicadas en infonomia.com, a una colección de libros que comenzara con uno Agustin Canalls (editado por una simpática cordobesa que trabaja allí Amparo Etchenique con quien almorzamos ayer en la Barceloneta) sobre la gestión de conocimiento en las organizaciones, continuara con otro de Alfons habiendo varios mas en preparación -incluyendo probablemente uno de este weblogista -todos en la editorial Gestión 2000.

Los proyectos son también mas ambiciosos como iniciar algún experimento pedagógico apoyado en alguna facultad del prestigio de la Universidad Pompeu Fabbra (aunque haya varias mas en gateras dispuestas a acompañar la iniciativa), así como la preparación de una ambiciosa iniciativa que consistiría en hacer venir a Barcelona -con motivo del Forum 2004- a los 100 infonomistas vivientes mas importantes del mundo. Pero esto recien esta en pañales.

Despues de charlar divertidamente nos fuimos a comer con Alfons a los alrededores pero lamentablemente el llamativo restaurante Oven estaba cerrado, así que debimos contentarnos con ir al Enna donde comimos Eiqueixada, Fabas y pescado, yo me tome dos cañas y bordée nuevamente el ridículo etílico, mientras tanto tomaba mentalmente nota de las carreras y de los estado de animo de Alfons.

De la física teórica a la gestión de la teoría (organizacional)

Alfons Cornella, nuestro hombre en Barcelona -nacido en 1958- se recibió de físico en la Universidad de Barcelona en 1983. Fanático de la física teórica nunca le intereso mucho ni dictar clases en la materia ni hacer carrera en ese campo. De todos modos se dedico entre 1983/86 (cuando España entró en la comunidad europea cambiándole la vida a la mayoría de los autóctonos incluyéndolo al propio Alfons) a la divulgación científica escribiendo mas de 900 artículos que están ahora archivados en la Enciclopedia Catalana.

Pero a el le interesaba otra cosa y entre 1988/90 se dedico a desarrollar un Centro de documentación ligado a la Innovación Tecnológico en el Parque Tecnológico del Valles -cerca de Saint Cugar por donde pase anoche. En esa época se trataba de conectarse a las bases de datos internacionales (como Dialog) pagando centenares de dólares por hora, tratando de mejorar la capacidad de investigación de estudiosos que veían a ese mundo como si fuera de ciencia-ficcion -como hoy lo hacen los académicos latinoamericanos 15 años mas tarde con el que emergio del ciberespacio.

Alfons ya sabia que lo suyo tenia mas que ver con los bits que con los átomos. Casado en 1989 con Fina, una bióloga que da clases en el secundario (con quien tuvo tres hijos nacidos en 1992 (Joan), en 1995 (Lluis) y en 1998 (el gurrumin se llama Guillerm), se fue con sus petates a Syracuse, Estado de Nueva York (lugar helado si los hay) para Cursar un Master en Gestión de la Información en 1990/91.

Desde que volvió en 1992 y hasta 1999 tuvo una de sus bases de trabajo en la prestigiosa escuela ESADE donde se instalo en el Centro de Información de Empresas. Los primeros Extra-Net datan de 1995 y en el medio de este ciclo llego a fundar una empresa Ideas for Change en 1999, a la que apostamos mucho en su momento, pero que no prospero por diferencias de pareceres y caracteres, con el dinámico Javier Creus, ahora en Madrid.

Actualmente baraja infinitos proyectos, trabaja muchisimas horas por dia, vive a pasos de su casa, odia viajar a larga distancia y mucho menos en avión, y tiene como obsesión crear un Club de profesionales que se reuna una vez por mes (parecido al club de los emprendedores que inicio Fernando Flores a mediados de los 90 en Chile y otros lugar de America Latina) en donde unas decenas de los lectores/empresarios mas vivarachos y dispuestos de Infonomia.com empiecen en serio a hacer circular y a hibridizar sus practicas y competencias compartidas.

Esta leyendo actualmente The rise of the creative clase, brillante alegado de Richard Florida en favor de la liberacion de las energías creativas de un nuevo tipo de hacedores/pensadores que incluyen en sus filas a muchos gays (esos mismos que algunos amigos míos quieren evitar en el Cafe Schilling), y todo tipo de heterodoxos -constituyendo junto a los obreros, apenas el 20% de la poblacion en los paises desarrollados y los operadores de servicios, un nuevo orden tri-funcional como el analizado por George Duby en Los tres ordenes o el imaginqrio del feudalismo (ver nuestro reciente libro Meta-cultura). Viene de leer y anotar con ahínco su ejemplar del maravillo Linked. The New Science of Networks de Alberto Barabasi que deberemos explorar aqui con mas detalle.

Mientras cruzamos las avenidas fuera de toda escala de la Villa Olímpica Alfons se entusiasma y delinea cursos de acción. Detesta la reelección indefinida de Jodi Pujol (22 años haciendo mas de lo mismo, al peor estilo de Shuberoff o de lo que queria hacer Mendez), y se entusiasma ante la posibilidad de que por fin deje la escena y sea sustituido por Maravall.

Personajes fuera de serie en sociedades harto convencionales

Amante del catalán, no es sin embargo un autonomista in extremis (por eso probablemente lea Mater Dolorosa de Alvarez Junco que le recomende), no esta a favor de los subsidios en favor de los amigos o del nepotismo de ningún tipo, sin embargo debe pagar su independencia con algún tipo de marginación institucional, y sobretodo de desinterés hacia el, por parte del establishment cultural o universitario, que no ve con demasiados buenos ojos tantas muestras de independencia intelectual y organizacional de su parte, asi como una exagerada valoración -segun los detractores- de la calidad por encima de cualquier compromiso material y sobretodo politico o nepotista.

Guardando la distancia, o no guardando nada, Alfons me recuerda mucho a Bruno Latour quien para ms sorpresa me contaba en el París de 1992 -hace exactamente 10 años atrás- cuan marginado y poco reconocido estaba el entre la pleyade de trabajadores del conocimiento franceses.

Así como Latour tuvo que encontrar a una editorial original pero marginada como La Decouverte para publicar sus obras (para después ser traducido por moles como Harvard University Press en USA y por Alianza Universidad en España), Alfons también apenas pudo recalar en Deusto -junto a obras de divulgación de escaso valor- no tiene tiene apoyo oficinal de ningún tipo, y cuando uno -entrando a Infonomia- cree llegar a la NASA o a la IBM, se encuentra con un puñado de valientes, que inventan el futuro a pulmón, y mas de una vez -aunque aparentemente ya no- debieron vivir dentro del pulmotor.

Mientras comíamos lentamente hablando de todo, abrimos varias conversaciones para la acción con Alfons, que se irán convirtiendo en productos y en actividades en poco tiempo mas. Nadie es profeta en su tierra. En casa de herrero cuchillo de palo. Podríamos convocar a varios otros refranes para describir esta situación anormal.

Le paso a Baruch Spinoza en los Países Bajos, le paso a tanto artista, ensayista o pensador en su momento. Le pasa a Latour en Paris y a Alfons aquí en Barcelona. ¿Será porque en situaciones de incertidumbre y con el entorno -si no en contra al menos indiferentemente hostil- la auto-estima se refuerza y las ganas de apostar a lo que creemos justo y necesario crecen acorde.

Probablemente. Los cierto es que Infonomia.com es mucho mas -porque anidan en su seno un puñado de personas que le estan dando forma a una de las iniciativas mas valiosas de diseño del ciberespacio que conocemos- y mucho menos -porque se hace todavía mucho a manopla y a destajo, sin apoyos ni ganas corporativas o estatales- de lo que suponíamos.

Por suerte iniciativas como éstas debe haber muchas en el mundo y a lo mejor una de nuestros desafíos como itinerantes que somos es tratar de ponerlas en resonancia y de buscar que los nodos que las instancian se vinculen entre si. En ello estamos. En pocos días Alfons nos responderá en detalle a una entrevista que le estamos haciendo en donde varios de estos puntos polémicos y acuciantes serán debidamente levantados.

Publicado enInfonomia

Sé el primero en comentar

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *