Algún día alguien se animaría a desenmascarar al gran bandido. Porque la caradurez tiene sus limites. Y aunque sea discutible si la critica feroz, enmarañadora, que arrincona a la formulacion de políticas y la debilita hasta volverla insulsa, es una autentica conspiración, no quedan dudas. Por muchos motivos el gobierno de Kirchner esta siendo demonizado por muchos intereses que se sienten vulnerados en su mismidad, y que molestos porque el porque el pensamiento único esta siendo cuestionado, insisten en que la única verdad es la realidad: la suya. Pero lo del economista de Juan Carlos de Pablo excede todos los limites y se pasa de castaño oscuro.
Lo vi un par de veces en mi vida y lo padecí en Septiembre del 2002 en San Luis cuando hizo de comparsa en esa celebre venta de ilusiones en Potrero de Funes titulada augustamente Creadores de nuevos escenarios de futuro , pero que en realidad funciono como plataforma de lanzamiento de los sueños delirantes del ex-gobernador de San Luis. Allí lo mas rancio del neoliberalismo irresponsable, incluyendo a Jorge Avila, Miguel Angel Broda, Rosendo Fraga, Marcos Aguinis y cía -que en ese momento dividían su corazoncito entre el Adolfo y el insólito Dr. Mendez- se dieron el lujo de desgranar fantasías y vendieron espejitos de colores frente a las atildadas señoronas que aman al Adolfo, imaginando que el estadista pasaría de señorear en la provincia a hacerlo en la nación
La ultima aparición de de Pablo -tal como cuenta picarescamente Julio Nudler en De Pablo en su retablo – en el Instituto Argentino de Ejecutivos de Finanzas (IADF) parece haber sobrepasado en sofismas, truismos, y fantasías toda performance anterior. Porque allí no solo tuvo el tupe de pontificar sobre el gobierno actual insistiendo en que Desde el 1º de marzo, a Kirchner no hay una que le salga bien, sino que al hacerlo se olvido de sus infinitos pronósticos fracasados y de sus recomendaciones suicidas como cuando en noviembre de 1994, un mes antes del estallido del Tequila, y cuando ya raleaba el ingreso de capitales que sostenía la convertibilidad, dio este horóscopo: Decisor: que las incertidumbres no lo distraigan. La Argentina es microlandia. En el momento de la decisión (respecto de los negocios y las inversiones) las incertidumbres deben ser ignoradas… porque generan una estrategia individual que le regala el mercado a los competidores…¡Animo. O cuando insistía que si salíamos de la convertibilidad el dólar se iría 20 a 1. Por si estos antecedentes no invalidaran todos sus consecuentes – es decir cualquier charla que pueda dar de ahora en mas- remato su exposición «académica» con el exabrupto típico de este calaña de personajes «Tenemos que unir al centroderecha el año que viene». Si esto no es ideología ¿la ideología donde esta?
Por suerte esta vez tuvo a su vera un expositor serio y mesurado como fue Axel van Trotsenburg, director del Banco Mundial para la Argentina, Chile, Paraguay y Uruguay que aunque sabe que la objetividad no existe, igual vale la pena batirse por ella. Lo de de Pablo es burdo, narcisista y sobretodo profundamente reaccionario y malsano. Seguir insistiendo en que los intereses del mercado son los intereses de la nación, y que lo que vale para el no vale para el resto es despreciar nuestra inteligencia y confirmar que la catástrofe argentina tiene muchas causas, algunas difíciles de asir, pero que una particularmente dantesca ha sido creer que de Pablo y sus adlateres hablaban desde la razón y la racionalidad cuando lo único que hacían, hacen y siempre harán era es y será defender intereses corporativos, mezquinos y profundamente no antinacionales, sino anti-crecimiento colectivo, anti-equidad y sobretodo antidemocráticos apostando en definitiva al carácter efímero de este formato varias veces centenario de articular los intereses políticos y económicos. Dándole lamentablemente la razón a quienes insisten que democracia y capitalismo difícilmente puedan coexistir mucho tiempo mas. Para que Axel van Trotsenburg, director del Banco Mundial sonara como izquierdista ¿Cuando entenderemos quien es quien?
Lo de De Pablo muestra que está desesperado. Viene hace años con el discursito y el análisis de «rioba cheronca». Lo triste no me parece eso, sino que la clase dirigencial empresarial argentina lo acepte sin criticidad.
La gran mayoría de los ejecutivos medios y altos de la Argentina están formados en San Andrés, CEMA, IDEA, Di Tella y demás lugares donde este enfoque es el único admisible (o casi). Se comen esa visión de la vida, porque excede lo económico, sin cuestionarse nada. Como se forman trenzas, son los que mejores puestos de trabajo consiguen.
La Argentina liberal es un espejo del modelo soviético: larga decadencia producto de pensamiento único; no impartir instrumentos o educación orientada a resolver problemas concretos; nada de respeto por el que trabaja o vive cerca de uno; y, finalmente, el premio a la creatividad es muy bajo frente a lo que recibe el que repite el dogma oficial.