En esta rara ocasión no es a la gente a la que Google le pega abajo sino a su archirrival Microsoft, que esta preocupado y mucho por los devaneos de un motor de búsqueda, que se esta convirtiendo en un modo de vida y también en un negocio espectacular, que esta por entrar en colisión con los intereses de los amos de Seattle. (La foto es del buscador organizacional mini que por U$S 5.000 nos promete un mundo de nuevas sensaciones en la busqueda)
Tomándonos en solfa a la filosofía y en serio a todo lo demás