La pauta que conecta
Era un hombre que pensaba: algo muy peligroso en este país, Pablo Jacovkis, Actual decano de la facultad de ciencias Exactas y Naturales de la UBA y coautor de la compilación Al Honoris Causa. Manuel Sadosky en sus noventa años (2004))
La genial pregunta de Bateson sigue guiando todas nuestras búsquedas e iniciativas. ¿Cuál es el esquema que conecta al cangrejo con la langosta, a la orquídea con la rosa, y a los cuatro conmigo? ¿Y a mí con ustedes? ¿Y a nosotros con la ameba en un extremo y con el esquizofrénico en el otro?.
Claro se trata de una pregunta formal, mas alla de los ejemplos dados por Bateson y puede ser encarada de mil y una maneras. ¿Cual es el esquema que conecta a Clementina con los weblogs, a la Carrera de Computación científica de la UBA con la wikipedia, y a los cuatro conmigo? ¿Y a mi con ustedes? ¿Y a nosotros con el Mariano Acosta en un extremo y con la versión local de Internet en el otro?
En la nota del Business Week del 20 del Junio del 2005 acerca de The Future of Tech se pasa revista a algo que todos vivimos a diario y que resuena actualizado en la pregunta batesoniana.
Después de décadas de incubación, Internet se esta convirtiendo finalmente en un medio social. Los 80 fue la era del e-mail. Ideal para poner en contacto a dos personas entre, aunque su valor se esta devaluando gracias a los artilugios del spam que hace un par de días se enseñoreo con hasta esa entonces impoluta lista de distribución del news.
Con la emergencia del navegador gráficos en 1993 la red se convirtió en un medio de irradiación. Pero la Televisión le gano esta pulseada y la promesas de la Post-Television no vieron nunca la luz… hasta ahora.
El siglo XXI esta viendo desplegarse la era de los archivos compartidos, los blogs (del texto al video), los servicios de networking masivo y la posibilidad de poner en contacto inmediato a grupos gigantescos. Los resultados van desde la Wikipedia (en Junio del 2005 con 608.000 artículos en ingles y 53.500 en castellano) hasta Skype Voice sobre IP con 41 millones de usuarios en el mundo y creciendo a 150.000 mas por día.
Hombres que hacen posible maquinas y viceversa
Ya iremos por esos lares pero ahora queremos retroprogresar y volver sobre quienes han hecho posible estas sueños y fantasías convertidos en realidad. Porque justo cuando Internet avanza en su enésimo regreso prometiendo -una vez mas mas- cambiarlo todo (de eso trata ese numero especial de Business Week que combina sagacidad y autobombo en dosis iguales) han muerto en distintas latitudes dos personajes que sentaron las bases de este nuevo mundo.
Uno de ellos fue el ingeniero estadounidense Jack Saint Clair Kilby, quien desató una revolución tecnológica al inventar en 1958 el microchip, quien murió esta semana a los 81 años en Dallas, Estados Unidos
El otro y mucho mas cercano a nosotros fue Manuel Sadosky inventor de la computación en la Argentina.
Fue la suya una personalidad tan singular que mas alla de los merecidos obituarios que recorrieron su larga trayectoria de vida (incluyendo el muy enjundiosos y cariñoso que le dedico nuestro amigo Hugo Scolnik ) creemos que conviene volver a recorrer su itinerario, sus ganas y también sus frustraciones.
Conocí a Manuel Sadosky en el año 1984 recién inaugurado como Secretario de Ciencia y Técnica de Alfonsin. En ese momento dirigía yo el precario -pero a nuestros ojos valioso Boletin de lNAP– y en cada numero le dedicábamos una entrevista a un funcionario progre o con ganas de la época. Sadosky fue uno de los primeros de nuestra corta lista de 10 o 15 antes de que Luis Stuhlman se hiciera cargo del puesto de Roulet y terminara con algunas de las buenas iniciativas que habíamos tenido durante la gestión Roulet/Oszlak.
En ese entonces habían ya pasado mas de 20 años de cuando Sadosky había sido sacado a las bastonazos del mítico pabellón 1 de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA por las preclaras políticas fundacionales de Ongania y sus esbirros.
Sin embargo y aun cuando lo que hizo Sadosky en el gobierno alfonsinista culmino en la experiencia -después abortada por dos flatliners como Raul Matera yDomingo Liotta– de la ESLAI (Escuela Superior Latinoamericana de Informática) invento valioso y preclaro, sus obras mas duraderas e inteligentes no estuvieron asociadas al gobierno de Alfonsin que a los pocos años de inaugurado extravió el rumbo, en todas las áreas incluyendo la propia SECyT.
Sadosky resulta imborrable y fundacional en la historia de la ideas y de las practicas computacionales argentinas por lo que hizo en Exactas como vicedecano a la par de Rolando García y por lo mucho y bien que trabajo en Montevideo ayudando a formar a generaciones de computistas y científicos latinoamericanos inventando esta disciplina en el subcontinente.
Un hombre de muchos atributos
El padre de la computación argentina fue efectivamente vicedecano de la Facultad de Ciencias Exactas entre 1958 y 1966, asesor de la UNESCO, creador del Instituto del Cálculo (1960) y de la Carrera de Computador Científico (1963). Sadosky fue hijo de una humilde familia rusa, llegada a la Argentina en 1905, escapando de los pogroms. Con su sueldo de zapatero, el padre logró sostener los estudios de sus cuatro hijos en el Mariano Acosta.
Motivado por esta anécdota anteayer pase por la puerta de ese colegio camino a educ.ar y una mezcla de tristeza y alegría me recorrió. Alegría tratando de imaginarme a ese hijo de zapatero que vivía en la esquina de ese magno edificio, habiendo asistido en ese momento a una especie de catedral del conocimiento, y tristeza por ver al lugar abandonado y a la educación argentina a años luz de ese nivel, potencia y energía.
Sadosky nació en el momento equivocado, en el país equivocado y con las ideas (de redención de justicia e igualdad) equivocadas. Sadosky convenció a aristócratas del saber como Bernardo Houssay y Eduardo Braun Menendez de pagar U$S 300.000 para traer a la primera computadora a la Argentina -una Mercury Ferranti inglesa (ver Pablo M. Jacovkis – Breve resumen de la historia de la computación en Argentina ) que se inauguro formalmente en enero de 1961 y que durante 5 años se uso en una variada gama de problemas vinculados con la matemáticas concreta o aplicada (economía matemática, investigación operativa, estadística, mecánica aplicada, análisis numérico, sistemas de programación y lingüística computacional, dirigidos respectivamente por Oscar Varsavsky, Julián Aráoz, Sigfrido Mazza, Mario Gradowczyk, Pedro Zadunaisky, Wilfredo Durán y Eugenia Fisher).
No hay nada mejor para recorrer de un salto, su carrera, sus amores (solo dos Cora Ratto y Katun Troise), su enorme espíritu de benefactor (saludos entusiastamente por Tomas Eloy Martinez en su exilio caraqueño), su capacidad de convocatoria de talentos y contertulios en discusiones compleja muy ricas en el Club del Progreso y fundamentalmente su vocación de constructor de instituciones y de fomento a la jóvenes generaciones que recorrer el simpático libro del Zorzal Al Honoris Causa. Manuel Sadosky en sus noventa años (2004)
Manuel Sadosky en sus noventa años
Los cinco amigos que lo entrevistan, lo acicatean, lo reconocen y lo bien tratan son conscientes del rol estratégico de Sadosky en la construcción de una Argentina mas racional, mas seria, mas sincera y mas alegre.
La carrera de computación que fundo en la UBA, el Instituto de Calculo que erigió en 1960 y la introducción de la primera computadora electrónica alcanzan y sobran para convertirlo en el socio fundador de la computación en la Argentina.
La semblanza que de el hace Mario Bunge en el libro, así como la entrevista que le hiciera en el año 2002, recogen en detalle ese sabor pero sobretodo muestran rasgos encantadores de su personalidad, así como su dedicación descarnada y entusiasta a la pedagogía durante mas de 70 años.
El comentario de que quien no metió la pata en política en su tiempo o bien fue un indiferente o un cobarde testimonia el encarcelamiento de Sadosky en 1943 y su obligado exilio junto a su esposa Cora ante las amenazas de la Triple A en 1975.
Las alusiones de Sadosky a formadores de la talla como José Luis Romero o Jorge Romero Brest como practicantes en la escuela Normal Mariano Acosta, su abandono de la carrera de ingeniería, su inscripción en la licenciatura en matemáticas donde solo había 5 alumnos (entre ellos su condiscipula Cora) en la mítica sede de la calle Perú y sus referencias a maestros de la talla como Julio Rey Pastor o Beppo Levi o Mischa Cotlar muestran de que paño estaba hecho el joven Sadosky
Odiaba los exámenes y el marco de maltrato que los mismos suponen para los alumnos e ideo consiguientemente una ingeniosa estrategia para abolirlos, sin por eso perder nivel ni exigencia pero si haciéndole cortocicuito a sus efectos traumáticos. Sostenía -como muchos pedagogos actuales de las matemáticas como Stella Baruk (en L’âge du capitaine: de l’erreur en mathématiques. París: Seuil. 1992) que decir que la matemática es difícil es un disparate y que en realidad lo único que pasa es que se enseña mal.
Sadosky hizo mucho y casi todo bien. Formo gente, escribió brillantes libros de iniciación a las matemáticas superiores, era un orador de lujo y sobretodo una persona simple, noble y bien intencionada.
Gano un concurso de profesor de las matemáticas en la Escuela Naval usando el llamativo libro del cristalografo e historiador de la ciencia marxista ingles J.D. Bernal La función social de la ciencia (que me deleito con fruición en los años 70) y finalmente su concurso fue anulado gracias a un dictamen del propio Jefe de Policía Federal cuyo nombre fue piadosamente omitido por Sadosky en la entrevista.
Gracias a los oficios del profesor Warren Ambrose que era docente en el MIT y que fue cascado en la noche de los bastones largos denunciando el atropello al día siguiente en una nota en el New York Times, la ignominia recorrió el planeta. Después de que lo echaron de Exactas estuvo 5 años en Montevideo donde creo el Centro de Calculo. Allí consiguió que Enrique Iglesias, actual presidente del BID, facilitara la compra de una IBM 44 que se instalo en la Facultad de Ingeniería del paisito.
Fue muy amigo de Gregorio Weinberg quien en su nota incluida en el libro recuerda la increíble colección de Tratados Fundamentales que codirigieron juntos, y que incluyo títulos tan notables como Mentalidad Primitiva de L .Levy-Bruhl, el Tratado Teologico-Político de Spinoza, obras de Voltaire, D´álembert, etc.
Sadosky fue profesor titular de la UBA entre 1955 y 1966 es decir en la época de oro de la Universidad,acompasada por la presencia de José Luis Romero, Risieri Frondizi, Fernández Long, Vicente Fattone (algo que puede ser entrevisto en la maravillosa compilación de Catalina Rotunno – Eduardo Díaz de Guijarro La Construcción de lo Posible La Universidad de Buenos Aires de 1955 a 1966 -también dictada por El Zorzal).
De esa época glorioso también data el armado de la Fundación Albert Einstein que tuvo como con gran protagonista a la primera esposa de Manuel, Cora Ratto quien falleció en España en 1981.
Tantas cualidades que en nuestro país rara vez se encuentran dispersas entre varios se aunaron en Sadosky. Se desvivió siempre por los otros y ayudo a los prójimos a mas no poder. De esto trata en detalle la semblanza que Sadosky hace Tomas Eloy Martinez en la citada obra, quien paso cantidad ingente de días en el cuartito de atrás de la casa de Sadosky en Caracas escribiendo los primeros borradores de lo que terminaría siendo la maravillosa La Novela de Peron.
En esa casa coincidió con Julio Cortazar y entre los tres jugaron interminablemente con los maravillosas jerigonzas de palabras que se arrellanan en el Finnegans Wake de James Joyce uno de los libros favoritos de Sadosky.
Mostrando una inteligencia política sin par (ademas de la varias mas que lo habitaban) Sadosky le anticipo a Eloy Martinez que tuviera cuidado con Peron, ya que era un plano inclinado con su propia ley de gravedad y que todo lo dicho sobre el era atraido y convertido en algo muy distinto de lo que uno suponía y querría
Las semblanzas de Jaim Etcheverry rector actual de la UBA y de Pablo Jacovkis su actual decano de la FCEyN, ahondan en anécdotas, en detalles, en resonancias y en sempiternas deuda y admiración ante tamaño talento que desaprovechamos tanto. Y sobretodo respeto por sus obras escritas a fines de los 50 con Rebeca Guber Calculo Numérico Gráfico y Calculo Diferencial e Integral que vendieron mas de 120.000 copias a la fecha, fotocopias excluidas.
En un país donde juntos somos menos el sembró y cosecho. Beato lui.
Otras referencias
«Queriamos tener una universidad de excelencia» en la compilación de Catalina Rotunno – Eduardo Díaz de Guijarro La Construcción de lo Posible La Universidad de Buenos Aires de 1955 a 1966 Libros del Zorzal (2004)
Semblanza biográfica
Enigmatico y cariñoso recuerdo del maestro Recuerdos del futuro Por Leonardo Moledo
Entrevista
La primera vez que oí algo relacionado con Sadosky fue en el secundario, referido a un cuadernillo de tapas de cartulina anaranjada, con series de números de senos, cosenos y tangentes, que en las clases de matemática en alemán del secundario se llamaba formalmente, la «Sadosky Tafel». En ese momento, al menos para mí, ese nombre estaba en igualdad con el de José C. Ibañez, Patricio Randle, y no se quién más. Qué ignorancia la nuestra! Qué falta de contexto! Qué descudio por parte de los profesores de no aclarar desde chicos este tipo de detalles!
me gustaria que me mandaran informacion del tema porque quisiera seguir estudiando algo de computacion pero no estoy muy segura de los temas que contiene.Tambien quisiera que me mandaran direcciones donde se pueda estudiar una carrera de computacion .
gracias.
Que es muy asombroso y k m e eseña nuevas kosas y deverdad es muy infantil lo k studes hacen io studio paginas web y mejores paginas k ustedes d verdad k son una porkeria de mierkoles
Que es muy interesante me ayuda mucho
yo pienso que este tema es muy importante en el campo de lainformatica por favor me pueden enviar mas informacion a mi correo que es :cristianrojas_yo@hotmail.com
le falta un poco mas de informacion
PARA PODER EMCONTRAR LO Q ESTAMOS BUSCANDO
PERO PSS ESTA BIEN
fala mas informacion sobre el
necesitamos mas informacion
ojalá hubiéramos tenido mil Sadosky, aunque no se si no los hubiéramos desaprovechado como a Manuel, que desgacia nuestra sociedad que tanto le cuesta reconocer los talentos y los benefactores y hasta los castiga a bastonazos, ademas de Manuel se me ocurre Milstein y tantos otros. Dios nos ampare por que no hemos mejorado nada.