A Craig Barrett no le cayo muy bien que Nicholas Negroponte concitara tanta atencion en la Cumbre de Tunez con el cascajo verde. En realidad lo que a Craig no le gusto nada, no fue tanto el incipiente aparatito, que todavia tiene que tomar mucha sopa para covertirse en una PDA inflada y autosuficiente, sino las endechas permanentes que Nicholas le dedica a las laptops comunes, acusándolas de máquinas sádicas, de costosas latas de sardinas podridas, de monumento a la ineptitud y la codicia.
Por el mismo motivo Michael Dell lo desacredita a nuestro san Nicholas tildandolo de utópico y de comedido. De vendedor de ilusiones, de mercachifle de lo imposible y otras ricuritas por el estilo
Detras de tanta animosidad se esconde algo mas que competencia desleal. Mas alla de que sea posible o no fabricar una maquina realmente barata, lo que aqui esta en entredicho es en que consiste exactamente la brecha digital y como se puede remediarla.
Porque ¿la brecha digital es cuestión de mas maquinas hasta llegar al sueño/delirio de una por habitante en el planeta? ¿Y si ese fuera el caso se podría llegar al objetivo con máquinas que cuestan en origen entre quinientos y mil quinientos dólares (piso de las desktops y de las laptops)?
Mas bien que no. Por ello si la brecha digital fuera cuestión de maquinas, habría que abaratar su costo en forma abismal, algo que por un motivo u otro los fabricantes de chips, de hardware y de software no han previsto hacer por las mas variadas razones que oscilan desde el lucro desmedido hasta la falta de imaginación, cuando de innovar en materia de interfases, sistemas operativos, aplicaciones y circuitos integrados se trata.
¿La brecha digital es cuestión tan solo de usos y costumbres, de adaptación de la maquina al curriculum y de las potestades de la electrónica a los imperecederos valores de la tinta y el papel? Si ese fuera el caso se trataría de reponer todos los valores del la tabletas sumeria, el códice el incunable y el libro, en variantes electrónicas.
Los PDF y las bibliotecas digitales serian la panacea y la reconciliación del cielo y de la tierra estaría a la vuelta de la esquina sumando a las bibliotecas en papel las etéreas y virtuales
¿La brecha digital es tan solo cuestión de una formación docente que se consigue fácil y rápidamente a través del e-learning o la instrucción asistida por computadoras, a través de una renovación del curriculum y de buenos formadores de formadores? Entonces creemos un Instituto Nacional de formación docente digital y listo el pollo.
Por supuesto que la brecha digital es una combinación de todas las interpretaciones reduccionistas anteriores y muchas mas. por eso la propuesta de Negroponte pisa muchos callos y son demasiados los intereses dispuestos a tirar al bebe de la laptop de 100 dólares con el agua sucia fuera de la bañadera.
Para Negroponte su propuesta pedagógica pasa por una abolición de la pedagogía que supimos conseguir, por chicos aprendiendo y enseñado a chicos, por docentes que aprenden de los chicos, por una potenciacion de la alfabetización digital y analógica, por una reinvención de la escuela, por una abolición de los muros, por una retroformación de los padres.
¿Se podrá lograr? ¿Es su cacharro lo que nos salvara de tanta tontería organizada? ¿Puede un país ligera y alegremente tirar centenares de millones de dólares en un experimento utópico? No seamos tercos ni ingenuos. El proyecto OLPC tiene que pasar por mil filtros y revisiones antes de convertirse de un prototipo hipotético en una herramienta efectiva de achicamiento de la brecha digital.
Pero algo es seguro., Ni con las laptops tradicionales, ni con el software convencional, ni con la formación docente antigua o moderna, ni con visiones perimidas acerca de la relación entre tecnología y educación achicará la brecha. El programa OLPC trata de remediar todas estas limitaciones ya conocidas Solo no lo lograra, pero sin el (y/o su filosofía subyacente) se acortará la brecha.
Por eso mas alla de que finalmente Nicholas consiga lo imposible al mejor estilo del mayo frances que nos instaba a ser realistas y pedir lo imposible, vale la pena recordar que su intimidad con Seymour Papert permite imaginar un universo de posibilidades que todavia no ha sido explorado. No sabemos si el proyecto OLPC saldrá de las gateras y se derramará por el mundo entero, pero la idea es convincente, si muchos ladran es señal de que el caballero va bien encaminado, y le deseamos el mayor de los exitos.