Participé hace un tiempito un panel. Debe haber sido la enésima en mi vida. En un panel se amontonan personajes, mas o menos conocidos y cada uno desgrana su discurso. Algunos son mejores oradores, otros sufren poco o mucho con lo que tienen que decir, otros sufren lo que tienen (tenemos) que escuchar.
Cuando se trata de un multitud, en este caso éramos seis ademas del moderador, que uso casi el doble del tiempo que cada uno de nosotros tuvo a su disposición, la sesión puede hacerse interminable. Y de hecho ésta lo fue.