Saltar al contenido

Experiencias intensas en comunicación interactiva

grobos1.jpg

¿Con que otra maquina la maquina literaria puede ser conectada?

Lo escribió Gilles Deleuze hace tanto tiempo y yo lo siento cada tanto, a veces con una fuerza y una intensidad que supongo que fue la que el mismo Deleuze en sus momentos de gloria dejo granadas para siempre.

Porque tiene mucha razón ese autor imperdible (esa multiplicidad de yoes hormigueantes), que leímos con fruición desde nuestros años 1969 en París, a quien conocimos en Vincennes en 1974, cuando dice -en Milles Plateaux– que ante un libro hay que preguntarse con que funciona, en conexión con que hace pasar intensidades… porque según el cuando se escribe, lo único verdaderamente importante es saber con que otra maquina la maquina literaria puede ser conectada y debe serlo para que funcione.


Y esto vale tanto para la lectura como para la escritura, para las exposiciones como para las charlas, para la puesta en acto del cuerpo como para la comunicación (o comunión) bien sucedidas.

Y así como en una viñeta anterior «La inverosímil letanía del no ser. Panelistas pasados por la maquina de decir trivialidades en la ciudad universitaria«, comente el tanteo y la necesidad de probar permanentemente formatos y dinámicas para conseguir que el efecto de transmisión se produzca finalmente, esta semana me encontró unido y bien conectado

Los episodios e instancias fueron varios pero quizás los dos mas logrados fueron la visita a Carlos Casares con el Ministro de Educación, y el panel que el mismo día aconteció en la Biblioteca Nacional. Empecemos por el primero.

Una jornada dedicada a la sociedad conectada en red

Podemos imaginarnos muchos formatos para una convocatoria. Masivas o selectivas, en auditorios formales o en instancias mucho mas «casual». Con una disposición mas rígida de clase o con algún formato especial que facilite la interacción en grupo. La lista de antinomias o combinaciones puede durar eternamente.

He estado en ámbitos de formación de lo mas variados, en muchas regiones del mundo (incluyendo Malasia y Japón), frente a audiencias masivas de distinto tipo, pero si hay un formato o espacio que me es bastante ajeno es el rural. Y eso que en la Argentina hay 12.000 escuelas rurales, y eso que a pesar de la enorme concentración urbana el país esta lleno de pueblos y pueblitos.

Por eso cuando me entere de que en Carlos Casares a 308 km.. de Buenos Ares habría una jornada dedicada a la sociedad conectada en red, me pareció raro y llamativo a la vez. Claro cuando me comentaron que no se trataba tan solo de una jornada de capacitación o de información, sino que se estaba inaugurando la segunda ciudad Wi Max de la Argentina (la primera fue Lobos hace 2 años) la cosa me empezó a cerrar mas pero no por eso me intrigo menos.

Después me enteré de que Javier Firpo a cargo de la cara educativa de Intel estaría en la jornada. Algo bastante comprensible ya que Javier hace años que viene bregando con el programa de Intel… para capacitar docentes en las provincias argentinas siguiendo una metodología ad hoc.

También se comentaba que el Ministro Filmus a lo mejor asistiría por cuanto las jornadas estaban organizadas por el rey de la soja Gustavo Grobocopatel, quien había venido en alguna ocasión al Ministerio y a través de AAPRESID había tentado al Ministro a compartir sus ideas aventureras y muy enderezadas a promover la sociedad del conocimiento en el ámbito rural.

La cosa podría no haber pasado de tantos dimes y diretes si no hubiese sido porque el Ministro me convoco para acompañarlo y siendo las 11 de la mañana de un jueves de cielos tranquilos estábamos instalados en un Piper Navajo de 7 plazas, volando a una altura de 1200 mts y a una velocidad de 300 km rumbo a Carlos Casares.

Las cosas cambiaron un tanto desde mi ultimo viaje en avioneta surcando los cielos de Houston rumbo a Nueva Orleans hace casi 30 años. Ahora los avioncitos llevan un GPS que les marca la ruta igual como si fuera un coche, en algunos casos hay hasta un borrador de catering que incluye media lunas a la ida y empanadas a la tarde, los motores no son tan ruidosos y si nos toca un día como el del viaje con bruma pero despejado, el trayecto es apacible, se puede charlar distendidamente y hasta leer o escribir algo.

Sorpresas nos da la vida campestre

Cuando llegamos, incluyendo a Esteban Galuzzi CEO de Intel que viajo con nosotros y que a la tarde brindaría una demo, nos estaba esperando el mismisimo Gustavo Grobocopatel en una poderosa camioneta y después de pasar por el centro de Carlos Casares fuimos hasta el lugar del evento, que no era nada mas ni nada menos que la sede del imperio situado exactamente en la ruta 5 km 309.

Alli todo fue sorprendente. Desde la fibra óptica que se abre ante la demanda y brinda conectividad masiva a todo el emprendimiento, hasta oficinas que no tienen nada que envidiarles a las de IBM… en USA, hasta una sala de conferencias la Hector Ordoñez, simulando el corte de un tanque australiano, no solo bella sino cómoda y super conectada, hasta -lo mas preciado- la propia presentación del segmento educativo que nos sorprendió muchisimo.

Se trataba de una serie de experiencias educativas que corresponden a distintos programas desarrollados por la Fundación Grobocopatel. En si mismo ninguno es inédito ni tampoco plantea escalar a niveles fabulosos. Pero si vamos al detalle nos encontramos con emprendimientos innovadores, con ejercicios que no se ven comunmente en otros lados -a pesar de contar con mas recursos y posibilidades.

Que 8 directoras de escuelas primarias se junten para desarrollar un proyecto de alfabetización conjunta entre escuelas rurales y urbanas del partido. Que el intendente municipal apoye entusiastamente el proyecto. Que distintas organizaciones del Tercer Sector logren buenas conversaciones con el sector estatal y las donaciones de la Fundación Los Grobo, y que todo eso se trasmita con ganas, fruición pero sobretodo efectividad obliga a sacarnos el sombrero una y mil veces.

Que en el medio del campo nos encontremos con 300 personas, entre ellos ejecutivos de primer nivel de Intel, Ertach y BGH. Que la fundación Los Grobos trabaje con tal grado de profesionalismo. Que se haya podido filmar un video futurista imaginando como será la conectividad rural en 10 años y que el mismo resulte atrevido y cercano no es mérito menor.

Educ.ar Presente

Por nuestra parte -e inesperadamente- tuvimos la oportunidad de hablar larga y detalladamente de educ.ar. Después de una presentación del Ministro -que seria retomada en unas reflexiones y conclusiones finales- pude explayarme con bastantes ejemplos y apoyándome en distintos enfoques en la misión, función, objetivos, historia y prospectiva de educ.ar.

Para mi sorpresa -aunque las docentes y analistas que tenemos en la propia educ.ar me lo recuerdan permanentemente- casi nadie sabia que el portal estaba vivo, que el Ministerio esta desplegando una campaña de alfabetización digital, que nuestra filosofía es un 100% afín a la de los emprendimientos mencionados, y que las áreas de colaboración y las posibilidades de sinergia son enormes y las explotaremos de inmediato.

Hay otra dimensión del encuentro que no es transmisible. Las risas, la alegría, las ganas, la capacidad de realización y de convocatoria, la presencia de conocidos desde Ale Prince a Lucas Lanza, desde Asunción Zumarraga (una AG que fue alumna mía en la Maestría en Administración Publica hace ya casi dos décadas) a Eduardo Fellner el director del video. (Ver aqui una síntesis institucional de la reunión)

Lamentablemente estábamos corriendo y no pudimos quedarnos siquiera a comer, apenas picamos alguna empanada a las corridas y tratando de que la Coca Cola no desafiara a la ley de gravedad. Al rato ya estábamos enfundados nuevamente en el Piper Navajo y una hora mas tarde aterrizábamos suavemente en el Aeropuerto de San Fernando, sin darnos cuenta llegábamos a Palermo y al rato salíamos para la Biblioteca Nacional…

Del campo a la ciudad. De la acción a la reflexión. O al vesre

Es muy lindo el auditorio de la Biblioteca Nacional. Ya lo había ocupado 2 o 3 veces antes dando charlas, participando en alguna mesa redonda, coordinando una actividad para el grupo Clarín. Queda en un edificio medio achacado pero emblematico, esta cerca de mi casa, tiene un buen cañón de datos, así que presentar algo en ese lugar cuenta con el mayor de mis beneplácitos.

biblionacional.jpg

Esta vez me toco participar de unas jornadas «La Cultura Argentina Hoy» que vienen haciéndose desde el pasado 15 de junio – en la segunda edición de este ciclo- y cuyo objeto de análisis han sido El humor, las creencias religiosas, la solidaridad, el jazz, los jóvenes, la identidad nacional, el trabajo, la lengua, la violencia y las nuevas tecnologías

Entre los expositores (casi siempre 3 o 4 por sesión) desfilaron nombres tan conocidos como Rep, Horacio Fontova, José Nun, Ana María Shua, Marcelo Zlotogwiazda, Carlos Altamirano, Marta Novick entre un listado larguisimo de casi 40 personas

Cada sesión concita gran cantidad de gente, en algún momento ese jueves hubo casi 200 personas, y como conocía a los participantes, Guillermo Cullel de Clarin.com y Mariano Sardon , un cuasifisico devenido artista digital, suponía que el encuentro podría ser ademas de placentero, productivo.

En el interin nos filmaron para la hemeroteca del evento, pudimos ver desfilar a muchos habitúes de estos eventos y nos preparábamos para una reunión que a la postre fue mucho mas interesante de lo que parecía.

Evitando la tentación de los lugares comunes

Tenia alguna duda menor por lo mal sucedido del evento en Arquitectura hace unos meses. La verdad es que cada vez que escucho la palabra nuevas tecnologías me dan ganas de sacar un revolver. Tiene razón Lucien Sfez cuando insiste en su imperdible «Técnica e ideología. Un juego de poder» que las dicotomías del tipo viejas vs nuevas tecnologías o tecnofilia vs tecnofobia no quieren decir absolutamente nada.

También apunta en la misma dirección Carol Marvin -en su clásico pero poco leído When Old Technologies Were New: Thinking About Electric Communication in the Late Nineteenth Century – llevándonos a dar vuelta a la cosa y en vez de plantearnos la novedad de las nuevas tecnologías llevarnos a preguntarnos mas bien por la novedad de las viejas tecnologías en el momento de su emergencia.

Porque mucho mas interesante que hablar del ultimo modelo de generador eléctrico de GE es tratar de ver al mundo cuando aun no existía la electricidad y esta estaba tratando infructuosamente de imponerse a las entonces funcionales tecnologías del gas.

Marvin es terminante. No somos la primera generación en maravillarnos acerca de los cambios vertiginosos y supuestamente revolucionarios en las dimensiones del mundo y las relaciones humanas que hace posible/imposible gracias a las nuevas formas de comunicación. Tampoco es la primera vez que vastos sectores de la población se asombran acerca de los cambios brutales que las tecnologías provocan en los patrones y formas de vida.

Si esta experiencia que llevo a la tapa de La Nación a dedicarle un número a la Cibervida (10 años mas tarde que la revista Time) es única en el detalle, su estructura es curiosamente la de la modernidad. Desde la perspectiva histórica la computadora no es otra cosa que un telégrafo instantáneo con una memoria prodigiosa y en algún sentido (aunque no en todos) todas las invenciones en el mundo de la comunicación no son mas que variaciones sobre la plantilla original del telégrafo.

Al menos esta hipótesis fue debidamente documentada por Tom Standage en The Victorian Internet . Y muchas de las dudas que afloran en todas las charlas que hacemos -como se vera a continuación lo mismo paso en la Biblioteca Nacional- insisten en que en su momento el telégrafo entonces (como Internet ahora) destruiría las relaciones sociales .

En el caso de la red las opiniones hoy son bastante mas balanceadas que hace una década y cada vez queda mas claro que lo hacemos en su seno es dedicarnos a lo que mas nos fascina a los humanos, a la comunicación social y a los juegos. Quizás pronto podamos sacarnos de encima la fase telegráfica y telefónica de la historia de internet. Pero eso habrá que probarlo.

Una presentación forml hecha por un no-joven nada formal

Con todas estas dudas en la faltriquera decidí que mejor valía presentar algo mas o menos formal en vez de perderme en divagaciones varias, y que ademas seria interesante mostrar con alguna contundencia que ciertos gráficos e imágenes del PPT a veces logran imponer (mas alla de las criticas maquiavélicas que Edward Tufte les propino para siempre).

Así las cosas la exposición formal -que no habrá durado mas de 20/25 minutos- estuvo estructurada en cuatro partes, dos que criticaban a la tecnología y dos que la defendían. Aunque en rigor no se trataba de defender ni de atacar, sino mas bien de exigir una lectura contrastada y contradictoria de cualquier fenómeno siguiendo el sano consejo de Daniel Casany en su reciente y excelente libro Tras las lineas. Sobre la lectura contemporánea (Anagrama, 2006) donde cierra el libro diciendo que un buen lector (auditor) es siempre el que cuestiona al cuestionador.

Volvamos pues a la charla titulada De porque la ficción de la tecnología hace posible su realidad. La misma consistió en un recorrido que paso por los siguientes temas. 1. El accidente generalizado. Si, pero.., 2. Marcos conceptuales. Ni uno ni dos, 3. Internet como bisagra de la historia técnica, 4. Porque la técnica no es (ni debe ser) una ficción instituyente resumidamente cada uno verso sobre lo siguiente.

1. Es cierto que los accidentes proliferan y que la nuestra es como quiere Virilio una era del accidente generalizado, pero tampoco exageremos, hay otros matices que permiten prevenirnos, sortearlos y hasta revertirlos.

2. Es impensable poder entender a la ciencia y a tecnología si no le hacemos cortocircuito a la cajanegrización que oculta su genealogía e ignora sus consecuencias -muchas veces inadvertidas. El fenómeno sociotecnico solo puede cabalgarse abrazándolo en toda su contradictoriedad y paradoxidad, y para ello hay que hacer proliferar multilecturas de sus ambigüedades e hiperdeterminaciones

3. Es probable que en sus usos fundacionales y preliminares Internet y en particular la Web 2.0 no hayan podido ir mas alla del paradigma telegráfico que adorno los 200 años de modernidad que nos acunaron. No lo es menos que con la emergencia de la Web 2.0, con la apropiación y diseño de nuevos espacios sociales de convivencia y sobretodo con la creación de realidades mestizas, híbridas o terceristas -cuya mejor encarnación actual es Second Life– estemos finalmente despegando de esa fijación

4. Sin embargo no es bueno (ni posible) que la tecnología -y mucho menos la economía de la innovación que la subtiende- ocupe el lugar de la política. Si bien toda tecnología es ficción, porque es antes discurso que movilización, y porque es antes controversia que producto, las condiciones de ficción instituyente van mucho mas lejos que lo que las tecnologías prometen y pueden cumplir.

Finale con fuoco

Después hablarían Mariano que mostró excelentes ejemplos de lo que esta haciendo y Guillermo Cullel que mostró un extraño -por árido e hiperminimalista PPT- y que hizo algunos comentarios mas o menos básicos acerca del periodismo digital.

Hasta allí todo mas o menos previsible y hasta decoroso. Pero después vinieron las preguntas del publico. En avalancha. Un par de ellas fueron para mis copanelistas y el resto una andanada se me cayo encima. Barrieron un espectro amplisimo y tocaron todos los lugares a veces comunes y muchos otros no, que afectan a la gente en relación a la invasión digital.

Derechos de autor, empeoramiento de la lengua, itinerarios cognitivos, posibilidades de apropiación locales. No terminaba de contestar una pregunta que ya se me venia otra encima. Otra vez se produjo el milagro de la comunicación, No importaba los contraargumentos (como que Hector Tizon había dicho allí mismo la semana anterior que la perdida de la letra manuscrita es la perdida de la palabra…)

Lo que estaba funcionando era precisamente una simbiosis entre escucha y devolución, entre inquietud y prolongación, entre cuestionamiento a la certeza y cuestionamiento al cuestionamiento de la certeza.

El coordinador se equivoco y nos dio media hora de mas, estaba por cerrar la sala y la gente, que en gran cantidad había permanecido atornillada a las sillas, no se iba. Después hubo corrillos y alguna chicana. Después hubo cena con Los Mancini y una invitada intelectualosa especial. Después nos congratulamos. Ojalá haya muchas mas reuniones como estas.

Publicado enEventos

Un comentario

  1. jk jk

    pensé que el jefe de clarin.com podía decir cosas más interesantes que la revolución de los blogs y lo bueno que está youtube.
    acá aporto la desgrabación de la conferencia

    http://www.geocities.com/proscurov/cultarg9.doc

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *