Saltar al contenido

Día: 15 julio, 2007

Es la interfaz estúpido. Acceso instantáneo y progreso infinito como claves de las interfases del futuro presente (a la Reactable)

reactable2.jpg

Sobreexpectativas y subrealidades. Pero al vesre también

Como nuestras sobreexpectativas frente a lo que sucederá son tan grandes, como hemos visto y leído tanta ciencia-ficción, como estamos hartos del vaporware y nos cuesta imaginar lo distinto cuando algo realmente sorprendente, llamativo o excepcional frente a un hecho, un dato, un aparato, una experiencia o una idea ocurre (en el plano conceptual, del prototipo, pero mucho mas de la implementación) generalmente caemos en el estado opuesto y no lo percibimos como debida magia y disrupción.

A menos que tengamos la neurona entrenada, a menos que hayamos afinado lo suficiente el diferencial, a menos que sepamos contrastar y articular debidamente la mirada de lo nuevo junto a la latencia de lo viejo y el pulso del porvenir. Tareas nada fáciles es cierto y para la cual no nos prepara ningún master, ni la lectura de parvas de libros, ni mucho menos ejercicios no muy felices de múltiple choice o de redacción de monografías universitarias pacatas y adocenadas.

Curiosamente el oxigeno es mayor en el Everest que en el Mar Muerto

capcreus.jpg

Claro que el título de esta edito coincide con la célebre metáfora acuñada por Toddy. No nos referimos aquí a la geografía sino a los paisajes mentales. No aludimos aquí a la densidad física de la atmósfera que todos sabemos reduce el oxígenocon la altura y obliga a usar tanques (a menos que uno sea un sherpa), sino a ese otro oxígeno que nutre a la mente y al alma.

A las ideas, a las conversaciones, a las experiencias, a la diversidad, al intercambio. A lo otro y lo distinto, a la hibridación y la multiplicación de perspectivas y puntos de vista. Que obviamente encarnan en los muchos lenguajes (y que nos hacen llorar de pena cada vez que nos enteramos de conjuntos enteros de lenguas que están desapareciendo, como le pasaba a Obiwan Kenobi cuando un planeta entero era destruido por el rencoroso Darth Vader).