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Mes: abril 2009

Hay que ser anfibios, híbridos y polialfabetizados

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Post original y entrevista a manos del excelente periodista Franco Piccato de La Voz del Interior

Entrevista a Alejandro Piscitelli, experto en ciberculturas

“Hay que ser anfibio, híbrido y polialfabetizado”

En su último libro, se sumerge en el universo de los nativos digitales, cuestiona la defensa corporativa del mundo del libro, y ofrece claves para diseñar la educación 2.0.

Escuchar a Alejandro Piscitelli supone un intenso recorrido por lo más vibrante del pensamiento contemporáneo sobre ciberculturas y medios digitales. Un itinerario que va y viene entre dos mundos. ¿Virtualidad real? ¿Realidad virtual? Los límites ya no están tan claros. Especialmente para los chicos de la “generación Y”, nacidos a partir de 1980, que se mueven como peces en el agua en el universo de las redes sociales, blogs, wikis, celulares e Internet.

Presentando Nativos Digitales en la Biblioteca Alberdi en Tucumán

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EDITORIAL PRESENTANDO NATIVOS DIGITALES EN LA BIBLIOTECA ALBERDI DE LA CAPITAL TUCUMANA Post original La Gaceta.com de Tucumán 28/4/2009

ENTREVISTA – ALEJANDRO PISCITELLI

“Estamos viviendo una época de exploración, de innovación”

El autor de “Nativos digitales” habló de los cambios sociales que produjo la tecnología. El experto en nuevas tecnologías y ex gerente del portal Educ.ar presentó en Tucumán su libro. Las viejas dicotomías.

Si se mira la fecha de nacimiento de Alejandro Piscitelli, puede decirse que el epistemólogo y escritor es un “infiltrado” en el mundo digital. Quizás sea este distanciamiento cronológico lo que le ha permitido a este hijo intelectual del siglo XX bucear en la lógica y en la filosofía que subyace a la producción de la era digital.

La cultura de los poslectores

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Con motivo de una nueva feria del Libro, editoriales, diarios, consiglieri, defensores del sacrosanto orden del papel, etc etc hacen lo imposible para: 1) mostrar su irreductibilidad a las modas tecnológicas, 2) hacer mínimas concesiones al universo digital que sin prisa, pero sin pausa tampoco, está poniendo patas para arriba un orden establecido hace 500 años y que por algun extraño motivo los primeros consideran eterno.

La revista Ñ (que junto a ADN de La Nación y Radar de Página/12 son núcleos privilegiados de esa resistencia) entre desganada y preocupadamente armó un informe titulado El libro y el pensamiento en la era digital coordinado por Alejandra Rodriguez Ballester & Jorgelina Nuñez. Pero por el resultado el tiro puede haberles salido por la culata porque por primera vez el balance es bastante mas duro para los libros que para las pantallas.

Abre este informe mi nota (inédita) “La cultura de los post-lectores “que dialoga con “Los libros y el pensamiento” de Gloria Pampillo. El dossier incluye además una entrevista a Robert Baensch, una pésima experiencia de lectura de e-books de Eduardo Belgrano Rawson (Francis Pisani leyó una novela entera de 600 páginas en el Kindle 2, y la gozó de lo lindo), “La condiciones de la época” sobre la poesía en Internet analizado en profundidad por Santiago Llach; “Mi blog, bitácora de escritura” de Daniel Link; “Google la nueva divinidad” por Jorge Carrión, y el que mas me gustó “La escuela me hizo odiar la lectura” de Francisco Tonucci. Como corresponde Clarín pijotea el material y no lo puso en línea. Por eso aquí subo el mío.

El bautismo de presentación de Nativos Digitales en San Miguel de Tucumán

Tejiendo futuros digitales

Un libro es una cápsula de ideas, pero sin sostén material apenas sería su visión incomunicable. Esos lenguajes privados de los que tanto hablaba Ludwig Wittgenstein. Para que el libro circule y se convierta en meme necesita de soportes materiales, necesita de impulsores y contradictores, necesita básicamente de una materialización (aunque sea en el ciberespacio).

El libro (al menos el aún físico de papel) no es tal sin el editor y el imprentero, sin el director de colección y el marketinero, sin el superlector editorial que lo evalúa y, sobretodo, si no tiene padrinos, gente que apueste a él, que estén tanto en el mercado como en la familia, que sean coautores que asisten a charlas, clases y semianrios, que son también auitores de otros libros con (o contra) los cuales el autor dialoga.

Adiós a Gregorio Klimovsky el mas tolerante de los epistemológos argentinos

Amigos los hay de varias clases

Con el lío que inventó Facebook (demonizado esta semana en la nota de tapa Espías en Red por la Revista Veintitrés que suma todos los lugares comunes a la incomprensión periodística en estado máximo) de los amigos Nesquik, ya es difícil saber quien es un verdadero amigo -o así quieren hacérnoslo creer algunos pícaros.

Yo los tengo en dos categorías, el puñado de incondicionales, que mas allá de la distancia y del tiempo, e indiferentes al contacto físico (otra vez gracias Internet por ser tan generosa) son sentidos como tales. Ya sea que los haya conseguido cuando estudiaba en la UBA hace 40 años atrás como Nora de México, o que nos hayamos cruzado en algún viaje o red como Mónica de San Pablo hace 30 años, o como Marcelo quien fuera hace 20 años marido de una jefa de trabajos prácticos de la Universidad Nacional de Rosario, pero también a quienes conocí en los últimos años como Horacio, Roberto, Iván o Ernesto y algunos mas.

Taxonomías de los medios, ¿Un medio un fin? ¿Para qué?, ¿Para quién?

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¿Clasificar para mejor vivir?

No hay duda de que la proliferación de posibilidades, oportunidades variedad y cantidad de opciones es una característica mas que visible de esta postmodernidad tardía, que algún autor lúcido como José Luis Marina a mas que bien caracterizado como ultramodernidad.

Y que la variedad excesiva (como su recíproca su casi ausencia) son tan valoradas como temidas. Barry Schwartz ha denominado a este estado existencial como la Paradoja de la elección, mostrando con muchos ejemplos de caso, que en presencia de opciones sucesivas de oportunidades de elección, abiertas en forma arborescente y en expansión indefinida, el consumidor o cliente o usuario tiende a inhibirse, paralizarse y finalmente a no-elegir aunque, batesonianamente, esa es otra forma de la elección.

Pero hoy no estamos hablando de consumir bienes en un supermercado cada vez mejor surtido, y por ello mismo crecientemente inhibidor, sino de hacerlo con conceptos y distinciones, con definiciones y clasificaciones, básicamente con taxonomías.

La reinvención de la Academia Internacional de Tecnología y Conocimiento(AiTyC)

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Los primeros pasos

Hace un largo tiempo atras, en las cercanías del periférico del DF mexicano, se creó AiTyC, una institución sui generis, al estilo de los mejores think tanks internacionales, dedicada a reflexionar, operar, diseñar, analizar y proponer ideas y procedimientos para mejorar la articulación entre tecnología y conocimiento.

Como toda nueva entidad que se precie, AiTyC empezó en grande, con reuniones en un hotel importante, con la consabida mesa rectangular que permitió que este conjunto de personas provenientes de muchos países latinoamericanos, pudiéramos juntar esfuerzos y ganas, para generar un nuevo emprendimiento iberoamericano.

Los cofundadores oscilábamos entonces entre ser gestores en actividad en el sector público y empresarios, líderes universitarios y ex-ministros, sobretodo de educación, ciencia y tecnología, gente con mucha experiencia en liderar equipos de trabajo, habiéndose/nos desempeñado en instituciones entre medianas y grandes, y con antecedentes interesantes como para poder poner en marcha trabajos colaborativos que algún impacto podrían llegar a tener en la región.