Derrick está mas que contento con su copia de Nativos Digitales.
No sé cuantas embajadas en Buenos Aires tienen residencias en las afuyeras, pero la de Canadá si la tiene. La conocí en febrero de 2004, recién vuelto de la excursión que hicimos con Laura Serra y el entonces ministro Daniel Filmus a Canadá, buscando el Santo Grial de la tecnología educativa. En ese verano se le hizo un homenaje a becarios y a profesionales que trabajan con distintos programas del gobierno canadiense, y como integrantes de esa misión nos correspondía también a nosotros participar de la jarana.
Anoche, como si nunca hubiese estado allí, me costó un montón encontrar el lugar. Y eso que Alejandro Prince me había comentado, que un taxista le había comentado que había que doblar en Libertador al 14.500. Lo cierto es que después de barrer la avenida un par de veces llegué finalmente a la linda ma nsión. Con un guardia a mi vera tocamos varias veces el timbre y después de un larguísimo rato finalmente aparecieron Prince & una de las anfitrionas.
A los pocos minutos estábamos libando con un pequeño grupo de una decena de personas entre las que se encontraban, ademas de Derrick, el embajador, Prince, Susana Finquelievich, Fernanda Rotondaro, Carmen Grillo, Gustavo Lopez y varios conocidos mas.