El gran viraje
En el año 2009 después de largos 13 años de existencia, la cátedra Procesamiento de Datos inició un gran viraje que llevaría a enormes turbulencias internas de la que aun no terminamos de salir. La situación no sería ni grave ni novedosa, salvo que en mas de una ocasión esta reinvención pareció cortarse por el eslabón mas débil, cual es tener a los alumnos como rehenes de concepciones muy distintas acerca de lo que es una cursada universitaria. Y en enormes dificultades al momento de evaluar la cursada y de reconocer los aprendizajes.
Mientras la crisis de las universidades es vivida en muchos lugares del mundo como una oportunidad para el cambio en el caso nuestro, combinada la problemática con una crisis de las instituciones en general cada día mas aguda, son pocos los intentos realmente interesantes de rediseñar los procesos de transmisión y de convertirlos en instancias de transacción. Algo en lo que venimos embarcados desde hace muchos años con suerte diversa.
En tanto, lo que vemos permanentemente son discusiones eternas acerca de cambios de planes de estudio centrados mas en la ecología de poder de los feudos en los que se han convertido las cátedras, luchas intestinas intraorganizacionales que clonan en mayor o menor medida las de la política macro convencional, y sobretodo una extraña sensación de deja vu ligada a una defensa directa o indirecta de lo académico como espacio de crítica, antes que una revision integral del lugar de la reflexión o la teoría en un mundo de abstracciones crecientes. Y consiguientemente como respuesta la creación de espacios de producción colaborativa orientada hacia la solución de problemas y necesidades, como los labs de distinto tipo (desde los ciudadanos a los Fablabs, desde los Hacklabs a los Medialabs) están revelando.
Nuevas versiones de las cátedras universitarias y otra cosa que se les parece pero que son muy distintas
Nuestra versión de la Cátedra de Procesamiento de datos en la UBA (porque hay otra que data del inicio de la carrera y estuvo sucesivamente ocupada por Crom, por Mangone y ahora Becerra) se inició en 1996 en un mundo tan distinto del que tenemos hoy, que llama mas la atención lo poco que pudimos cambiar (en términos pedagógicos y didácticos), que lo distinto que lo hecho puede aparecer a los ojos de los estudiantes (y también de muchos docentes, incluso algunos propios) en nuestra «inversión» en el modo de dar (o dejar de dar) clases.
Para nosotros la investigación es detección de las mutaciones e invitación a producir otras nuevas. Desconfiamos de los salvoconductos teóricos, del culto a los grandes autores del pasado reciente o lejano, de la invocación al trabajo del concepto como excusa permanente para reivindicar soterrada o explícitamente la autoridad del dicente, los modos convencionales de transmisión y adoctrinamiento, y el inevitable culto de la lectoescritura como forma privilegiada de pensar el mundo, para después y -si queda tiempo y la metodología lo garantiza- transformarlo (como si Marx no hubiese fulminado de un plumazo a Feurbach alla lejos y hace tiempo, poniendo patas para arriba esta secuencia).
Igual de lo que se trata no es de abroquelarse en filosofemas que solo tienen de interesante su transitoriedad. No se puede ser edupunk mas de una temporada o dos. Pero tampoco se puede ser académico en tiempos de intemperie, soñando con tiempos idos que no son bienvenidos. Ni tampoco hay que optar por artesanos pragmáticos (carpinteros filósofos) a los que se los corre por izquierda y por derecha, alternativamente, obligándoselos a endosar el sustantivo o el adjetivo y tertium non datur.
Dos trilogías consecutivas que terminarán si los idus quieren en un MediaLab
Tampoco es cuestión de tener que optar entre el tiempo largo y el tiempo superficial, entre la atención y los fuegos de artificio, entre los expertos y los dilapidadores de buenas intenciones. Se puede cambiar los programas permanentemente y sin embargo subterráneamente abrevar en continuidades profundas (ligadas a las metanarrativas, la metarreflexión, y la epistemología experimental). Se puede jugar con papelitos de colores y maquetas, y sin embargo estar empuñando los conceptos mas potentes y mejor fundados en dirección de una transformación efectiva de los comportamientos.
En su versión 2009-2011 Datos fue primero ANALISIS (con/en el Proyecto Facebook), después DISEÑO (con/en el Proyecto Rediseñar) y cerró esa secuencia con TRANSMITIR (con el Proyecto Medios del futuro). En su versión 2012-2014 Datos está siendo NARRAR (con/en el Proyecto Narrativas Trasmediáticas Interactivas), en el 2013 se abocará a LEER/ESCRIBIR (con/en el Proyecto Lectovisualizadores Hipermediales) y culminará con JUGAR (con/en el Proyecto Ludologia Aumentada).
Es sobre el trasfondo de estos proyectos de investigación/intervención de largo plazo y ambiciosas intenciones, que deben analizarse y evaluar las constantes mediamorfosis de la cátedra envuelta en forma intuitiva entre el 2009/11 y en forma mucho mas profesional (con la inclusión de una división de diseño como nuevo marco de construcción de proyectos) la lenta migración de un colectivo. Que comenzó hace ya 16 años a reinventar su ontología pedagógica, y que recién con estos dos proyectos trienales, empezó a encontrar un continente adecuado para llevar a buen puerto contenidos mas que interesantes, que por falta de horizontes y estrategias (mas ligadas a la reflexión que a la intervención) desperdiciaban la energía en vapor al peor estilo del motor de combustión interno que predomina en las cátedra universitarias «críticas».
La nueva fase necesita de una formación intensiva en nuevos modos de hacer, traducir, transponer, inventar nuevos formatos, seguir modificando los espacios de intervención (ampliándolos fuera de la Universidad, llevándolos al espacio público, interviniendo en distintos ámbitos y borrando en lo posible la distinción maniquea ellos/nosotros).
Gracias a todos los participantes del intercatedras4 que fueron aclarando muchos de estos puntos, y brindaron nuevas distinciones para seguir trabajando en forma práctica en la reconversión de la cátedra en un MediaLab de hecho o por derecho.
Continuará…
Soy exalumna de la cátedra y ahora, mientras curso mis últimas materias, estoy intentando amar mi proyecto de tesina sobre videojuegos y pedagogía… La verdad es que cuando cursé la materia allá por el 2007 leíamos «la academia y el monasterio» de Pekka Himanen, y lo ciero es que vivíamos como contradictorio el hecho de que nos propusieran una crítica a la educación y sin embargo nos evaluaban en los términos académicos más conservadores. La verdad es que envidio ahora a los alumnos que tienen la posibilidad de participar en estos proyectos. A seguir transofrmando a ver si se puede contagiar al resto.
Atento Saludo MAestro Piscitelli.
Importante dialogar con usted sobre algunos aspectos. Ruego me permita sus datos de contacto.
Uriel Hernando Sánchez Zuluaga
Gerente de Mercadeo Plaza Mayor Exposiciones y Convenciones.
Trabajo en el recinto feria de la ciudad de Medellín, Colombia. Tenemos algunas actividades que quisiéramos dialogar con usted. Muchas gracias.
Oros datos de contacto
buzondeuri@gmail.com
57-4-2617200
57-3 – 148880041
Quedo atento y de antemano muchas gracias.