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Categoría: Infonomia

Otra vez entreverado con periodistas, sin quererla ni beberla

Otra vez los desafios del periodismo en la era digital

El despiste es una de mis especialidades. Bastante seguido recibo invitaciones a reuniones y o bien no las anoto, o se me pasan (hace poco fue el colmo, me confundí por una semana una reunión en Mendoza, y perdí la audiencia y la paga), o no se muy bien donde quedan, quien las organiza, y hasta a veces no está demasiado claro cual es el tema.

Por suerte los organizadores me mandan mails, me insisten con los detalles prácticos, tratan de que no se me pase el día y el lugar, y me halagan lo suficiente como para que finalmente contrarreste mi molicie y aparezca en el lugar indicado a la hora justa.

Fue el caso esta semana del III Congreso Nacional e Internacional de Fopea. “Los Desafíos del periodismo en la era digital” que por suerte tenia lugar a pocas cuadras de mi casa. Así que con el menor de los esfuerzos posibles, me allegué al auditorio que tiene la Universidad de Palermo en el Piso 6to -en el que había estado hace dos años atrás abriendo una reunión de bloggers- y traté de aparecer una rato antes de mi mesa porque me interesaba escuchar al keynote speaker de la jornada que seria Jean François Fogel (Consultor, creador de lemonde.fr) quien dio una interesante charla acerca de “El impacto de la audiencia en el trabajo periodístico en Internet”.

Matt Mullenweg. Un emprendedor de 24 años que tiene mucho para enseñarnos

Segundo WordCamp argentino

El año pasado a instancias de la la labor organizativa de Mariano Amartino tuvo lugar en Buenos Aires el primero de los WordCamp a nivel internacional. El sábado anterior en la cómoda sala que posee Microsoft en la calle Bouchard, y ante un auditorio prácticamente colmado, volvió Matt Mullenweg a la Argentina y nos conmovió con su claridad, capacidad de síntesis y sobretodo amenidad y habilidad para mostrar lo que hace, mostrar en vivo y en directo como es un auténtico emprendedor, y como es eso de que «no» existen los nativos digitales.

Entre su anterior viaje y este Matt asistió a cerca de 20 wordcamps internacionales, aprendió a decir “Buenos Dias”,» Gracias» y algunos otros monosílabos castellanos, y adquirió una destreza como presentador llamativa. Igual -y a diferencia de tanto sanatero local- si bien admiró la osadía de que se hiciera la primera reunión internacional aquí, la que mas le gustó hasta ahora fue una que tuvo lugar en un pueblito filipino, donde entre él y la audiencia había una separación de una pileta y muchos murciélagos de por medio.

El periodismo, al borde del colapso como genéro


¿Noticiable dos años mas tarde? Uhmmm

La nota ocupó una página entera del benemérito matutino Clarin. La red de redes ya tiene quien la estudie: nace la Ciencia de la Web. La Periodista es al menos sincera y reconoce que el colectivo del que va a hablar nació hace 2 años. También reconoce que fue la nota publicada originalmente en el New York Times la que sirvió e base a la suya, y su aporte mas interesante son dos párrafos que supuestamente le arrancó telefónicamente a James Hendler profesor en el Rensselaer Polytechnic Institute.

El único problemita es que la nota original de Steve Lohr Group of University Researchers to Make Web Science a Field of Study, apareció nada mas y nada menos que el 2 de Noviembre del 2006, hace un poquito mas de dos años atrás. Y anunciaba la creación del grupo de estudio, que en el interín debe haber hecho bastante mas de que lo que aquí se anunciaba.

Cuantas cosas se dicen en nombre de las competencias digitales. ¿Algún día llegaremos al e-awareness?

Lo que hice y lo que deje de hacer

La casualidad opera permanentemente, a veces a favor, otras en contra. Dudo mucho de que si no hubiese estado en México, como desprendimiento de mi participación en el XXIV SOMECE Simposio Internacional de Computación en la Educación. Inteligencia colectiva en la era digital en Xalapa, hubiese participado, ya sea virtual o presencialmente en el seminario de e-competencias que está teniendo lugar en este momento en el Aula Central Roberto Zavaleta de FLACSO México. Lugar donde curiosamente, por mas que vengo al menos una vez por año al DF desde hac e tres décadas, y tengo «n» conocidos, que han sido alumnos y sobretodo profesores aquí, jamás había pisado previamente.

Y al revés, de haber sabido que la semana próxima el Instituto Tecnológico de Monterrey del Estado de México estaría celebrando, convocado por el promisorio jovencito Arturo Caro, su Techevent2008 , seguramente me hubiese quedado el fin de semana en el DF, y hubiese participado mas que entusiastamente en dicho evento, que recién empieza el próximo miércoles.

Un Congreso Panamericano en medio del quiebre tecnológico

1. Muchos congresos pasados y futuros

No sabía adonde habían tenido lugar los tres congresos panamericanos de comunicación previos, ni cuales habían sido sus respectivos leit-motivs. Google mediante ahora sabemos que el primero fue Industrias culturales y diálogo entre civilizaciones en las Américas, llevado a cabo en Montreal en 2002, el segundo en Zacatecas en 2003 y el tercero «Integración comercial o diálogo cultural ante el desafío de la Sociedad de la Información» tuvo lugar en Buenos Aires en 2005.

Tampoco el lema de este cuarto congreso «Industrias de la creatividad. Creatividad, Industrias Culturales y Desafíos para los Comunicadores fue lo que me decidió a asitir. A veces se tejen lazos de amistad con gente, que si son persistentes y benevolentes, consiguen que uno les diga que si, para traspasar la cordillera, estar allí menos de 24 horas, y volver al terruño, no sin antes haber armado alguna escenita o haber disparado algún terremoto epistemológico.

Ya había estado en la Universidad Mayor en su sede Huechuraba hace dos años, cuando Argentina perdió por penales su partido de semifinales con Alemania en el Mundial de Fútbol jugado en ese país. Esta vez no hubo fútbol pero también hubo un partido en el que me tocó perder. Fue el intento de conectar la computadora al cañón.

Cuando los museos están mucho mas cerca de lo que creíamos

¿Otro loco de los Museos?

Siempre me gustaron los museos, aunque muchas veces deploré las versiones exageradamente minimalistas y hasta casi paupérrimas que caracterizan a los nuestros.

Mas de una vez fuí al Museo de la Plata, y también en un par de ocasiones fui al Museo Argentino de Ciencias Naturales Bernardino Rivadavia en Parque Centenario, incluso en una variante extravagante una noche, cuando las huestes multimediales de la Universidad Maimónides lo convirtieron en una plataforma de experimentación, combinando el supuesto poder exploardor de las nuevas tencologías utilizando la dimensión histórica del Museo como pantalla, aunque bien podría haber sido al revés.

Hay excepciones a la pobreza museística local y en un lugar destacado esta el Museo Paleontológico Egidio Feruglio en Trelew, que me deslumbró en el 2000 y que revisitado en el 2008 seguia preservando su encanto y calidad de entonces.

Música 2.0, pro-ams y diciéndole que no a Adorno & Horkheimer

Serie aniversario 30 años

Un editor le pide a un grupo de personas que escriban unos libritos de unas 100 páginas, unos 100.000 caracteres en total, unas 17.000 palabras, equivalentes a larguísimas notas de revistas, semejante a un quinto de la extensión de mi libro Ciberculturas. Quiere festejar los 30 años de una de las pocas editoriales de neto corte y sabor latinoamericanos que aun perviven, no compradas aun por pulpos o tanques.

Los autores, todo muy reconocidos en el campo aceptan. En el listado estan incluidos Marc Auge, Manuel Cruz, Roger Chartier, Nestor Garcia Canclini, Ferran Mascarell, Joseph Romaneda y George Yudice.

La colección se presentó a fines del 2007 en Barcelona con cierto éxito, y los volúmenes de los convocados, todos amigos o conocidos, y la mayoria referentes importantes de los estudios culturales, la etnografia de la postmodernidad, la industria cultural o como quedó el mundo después de que por encima le paso la aplanadora neoliberal, hacen aportes despiertos, interesantes o llamativos en los distintos volúmenes.

Convergencia mediática, cultura participativa e inteligencia colectiva

Conceptos emergentes para realidades emergentes

Habían pasado pocos días después del derrumbe de las Torres Gemelas a cargo de Bin Laden y sus secuaces, cuando los reporteros de CNN escandalizados y habiéndose vuelto propagandistas acérrimos del gobierno de USA, tomaron imágenes inverosímiles de muchedumbres antinorteamericanas enfervorizadas agitando pancartas, que representaban a Blas de Barrio Sésamo pegado junto a Osama Bin Laden.

Apenas los creadores de Barrio Sesamo vieron esos carteles amenazaron con emprender acciones legales (¿contra las multitudes?), sin darse cuenta de que esa asociación había nacido a partir de una imagen photoshopeada realizada por Dino Ignacio, un estudiante de secundaria filipino, como parte de una serie de imágenes pertenecientes a la colección «Blas es malo» (en otras aparecía al lado de Hitler, del Ku Klux Klan, del Unabomber y teniendo, mas gratificadamente, sexo con Pamela Anderson).

La fusión tecno-política-artística. Gloria y loor a la Red Panal

«En el fondo, lo que estamos intentando es preservar el material cultural sonoro de una región, a partir de un registro digital. La idea es llegar a hacer un mapa de sonidos georreferenciado de Argentina y luego de Latinoamérica, y que cada audio de ese banco de sonidos pueda ser usado para seguir difundiendo nuestra cultura. Después, el tema de la composición por pistas es como desarticular un cuento en palabras, abrir el juego de sentidos, expandir las posibilidades de creación».Red Panal

Balbuceando un sábado a la noche

Varias semanas atrás Matías Neuburger me buscaba afanosamente para que participara del evento Encuentro de Cultura Libre y Música Colaborativa, que tendría lugar en el Centro Cultural de España en Buenos Aires (en la sucursal Paraná del ex-ICI), y que siendo un sábado a la noche me resultaba mas que chino, sobretodo porque en ese momento recién estaría bajando del avión que me traería de vuelta de Lima

Leer abre los ojos. Pero para ver el mundo de hoy se necesita leer muchas mas cosas que solo texto

Resistencia, lejos muy lejos

Estuve en Resistencia por primera y única vez hace unos años. Cuatro o cinco. Quizás el News se acuerde de la fecha con mas precisión que yo. Era una tarde de calor agobiante y me habían invitado por indicación de Juan Carlos Asistein a unas jornadas de TIC’s y educación que, dormidas durante casi una década, habían despertado de pronto y me tenían de invitado estelar.

Ese día apenas ví algo de la ciudad, creo haber corrido de un lado a otro, tal vez conocí a la Ministra de Educación (que era también responsable de CyT), y me quedó una imagen de docentes con ganas, ávidos, dispuestos a saber de que se trataba.

Volví anteayer al Chaco, esta vez de la mano de Mempo Giardinelli quien hace 15 años se lanzó a una aventura maravillosa y generosa cual fue inventar la Fundación Mempo Giardinelli en el Chaco para el fomento de la lectura.