Durante mucho tiempo creímos que las únicas máquinas de generar conocimiento eran la poderosa lógica deductiva, y las no menos convicentes herramientas inductivas. Curiosamente con lo importante que son ambas, difícilmente cualquiera de ellas pudiera dar cuenta de la novedad, de la innovación y de la generación de diferencias. Entra aquí a tallar una nueva forma de operar con las ideas que fuera denominada por el filósofo norteamericano Charles Sanders Peirce como abducción.
Para Peirce la abducción consistía en examinar una masa de hechos y a partir de ellos generar una nueva teoría. La aparición de herramientas innovadoras como la computadora han permitido ahora generar esa novedad a través de procedimientos ierativos como las simulaciones, la s interacciones y los prototipos.